El argumento para la solicitud está en la defensa del cine español que hacemos en la revista. Espero que no lo tomen por el lado simple: "defensa" no es, sin más, halago. "Defensa" puede ser, en muchas ocasiones, crítica constructiva. Hay muchas cosas del cine español que no me gustan, no me voy a poner a enumerarlas.
No me gustan, entre otras cosas, porque crecí con un cine español que me encantaba, con los mejores Amenábar, Fernando León, Medem... antes de caer en una peligrosa copia de sí mismos.
Sí, defendemos -defiendo- el cine español. Un cine español que se lo curre, con ideas nuevas, que no llame a papá cada vez que tiene un problema sino que se ponga a buscar desde dentro: ¿qué estoy haciendo mal?, ¿cómo podría hacerlo mejor? En estos cuatro años he hecho la crítica de decenas de películas y he tenido la suerte de ir a cinco o seis festivales de cine. Uno se hace un nombre de la manera más tonta.
Está muy bien, sobre todo a la hora de justificar acreditaciones... Seguiré contando.