Leo a Jabois, en concreto la frase ""Esas chicas con las que tomas una cerveza y a los cinco minutos te das cuenta de que no sabes por qué". Yo he coleccionado, si no cervezas, sí whiskys con chicas así. Las chicas equivocadas. Los errores. De eso intento hablar
aquí, pero no sé si la gente que me lee realmente me lee, es decir, si realmente se entera y diferencia lo que es verdad de lo que no.
Comment te dire adieu?
Dos aguas para ver al Barcelona ganar una liga, una terraza de la calle Luchana y una copa en el Lola Loba con una chica que vino a rescatarme. Esta mañana fragmentaron mi cerebro en decenas de fotografías, ahora tienen que ver qué hacen con eso. Ella no sabe los detalles, no le importan, pero sabe del miedo y se limita a aparecer en mi portal y llevarme de terraza a bar con mesitas y discografía de Blur de fondo, precisamente para hablar de las chicas de la cerveza y de las chicas con las que crees que podrías pasar toda una vida y realmente no sabes muy bien por qué. Niño estúpido.
Ese es mi insomnio: una mezcla de ansiedad y miedo. Mi vida, entre otras cosas, viene siendo algo parecido a
esto. La próxima vez que alguien me pregunte "¿y tú qué haces?" me limitaré a recitarle la lista, del uno al diez.
Ansiedad, Jabois, cribas literarias y el disco de Vetusta Morla, en concreto, la 1, la 3 y la 4. Quizá la 5. El resto me aturde, como si ya lo hubiera escuchado y siguiera sin entenderlo. Un insomnio muy poco heroico, en resumen.
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