lunes, septiembre 21, 2009

Diez reflexiones sobre el Eurobasket 2009



1- El talento se impuso en España cuando se combinó con el esfuerzo, especialmente en defensa. Claramente sobrepasados por una expectación excesiva -había que ganar, ganar fácil y además divertirse-, no hubo entre jugadores ni entrenador la comunicación suficiente para aliviar la tensión. Una vez que la tensión se alivió sola en el famoso "momento de no retorno", con la eliminación a un partido y las declaraciones de Marc Gasol calentitas, el equipo se soltó, defendió de verdad, se liberó de piernas y de cabeza y empezó a correr y dejarse de historias tácticas.

2- Quizá no quisimos creerlo en su momento porque sonaba a excusa, pero es cierto que la mejoría física de los jugadores y especialmente de tres: Pau Gasol, Rudy Fernández y un sensacional Garbajosa en defensa en las rondas eliminatorias se ha comprobado clave. Sería interesante ver cuántos contraataques hizo España en los cuatro primeros partidos y cuántos hizo en los cinco últimos.

3- Scariolo tiene mérito porque rectificar tiene mérito. No es cierto que los jugadores le puentearan o que se limitara a "dejarles hacer". Es cierto que se equivocó con la selección, es cierto que no supo manejar la angustia inicial -probablemente él fue el primer angustiado, su jefe le dijo: "o el oro o fracaso"- pero también es mérito suyo hacer análisis de la situación, dar más iniciativa a determinados jugadores, dejarse de encerronas tácticas maestras tipo lo de Sergi Llull y centrarse en aliviar la carga de sistemas en ataque para dedicarse completamente a la defensa. La defensa presionante de España requiere mucho más que inspiración, es un trabajo de equipo muy bien ensayado.

4- Pau Gasol se ha ganado un puesto entre los mejores baloncestistas de la historia de Europa, a la altura de los Sabonis, Petrovic, Kukoc, Belov, Cosic, etc. Su superioridad ha sido aplastante, y seguimos con la duda de que estuviera al 100 por 100 físicamente. Jugando solo unos 20 minutos por partido en las rondas finales ha promediado prácticamente 20 puntos, 10 rebotes, 3 tapones y unos porcentajes de escándalo. Imparable. Por si las sensaciones no bastan, he aquí unas cifras: campeón de la NBA, campeón del mundo, campeón de Europa, subcampeón olímpico, MVP del Campeonato del Mundo de 2005 y del Europeo de 2009, máximo anotador en las Olimpiadas de 2004 y 2008, medallas de plata en los Europeos de 2003 y 2007 más una de bronce en 2001. Sorprendentemente, a sus 29 años, solo ha sido dos veces All- Star por unas siete u ocho de Nowitzki. Eso no dice mucho de los entrenadores estadounidenses.

5- Los nuevos: prodigioso Llull, recuperándose del palo contra Turquía, en el que él no tenía nada que ver. Una gran esperanza para el futuro. Competitivo y talentoso, como los demás. Ricky Rubio se consagró en las últimas rondas haciendo lo que mejor hace: presionar en todo el campo y correr. Quedan dudas sobre su capacidad de dirigir el equipo, pero con 18 años esas dudas son razonables. Claver ha pasado prácticamente desapercibido y es una pena, porque es un jugador de enorme futuro.

6- El arbitraje ha sido deplorable, como el nivel general del campeonato salvo el final de España: demasiados partidos resueltos a hachazos mientras todo el mundo miraba a otro lado. Cuando se pitaba una falta, el jugador fallaba los tiros libres, marcadores bajísimos no ya por jugar al límite de la posesión sino por jugar rematadamente mal. Una marcada y preocupante ausencia de talento.

7- El quinteto ideal: completamente de acuerdo en todo, porque a Spanoulis había que premiarle por llevar a Grecia al bronce, por muy mal que jugara los dos últimos partidos. Erazem Lorbek me ha sorprendido, la verdad, y lo mismo digo de Teodosic, que quizás llegó muy justo a la final y con muy poca confianza. Tuvo dos o tres partidos absolutamente geniales: anota y asiste. Rudy Fernández es posiblemente el segundo mejor jugador europeo en estos momentos, detrás de Gasol. Hace lo que quiere, es un espectáculo. Además, defiende bien.

8- Turquía tiene muy buena pinta pensando en 2010 y su Mundial. Quizás les faltó algo de intensidad en las rondas finales, como si ya estuviera todo hecho y esto solo fuera una prueba. La actitud y efectividad de Turkoglu dejaron mucho que desear. Ilyasova es ya una estrella, Arslan y Tunceri dirigen con acierto y tienen un buen montón de pivots sólidos ahí dentro, destacando a Asik, aunque tendrá que mejorar los tiros libres. Si consiguen convencer a Okur para que vuelva y Turkoglu recupera su motivación, podría estar en las semifinales al menos el año que viene.

9- Sensaciones balcánicas agridulces: éxito descomunal de una Serbia muy joven pero muy bien entrenada y con tres jugadores por encima del resto: Teodosic, Krstic y el sorprendente Velickovic. Croacia cumplió el expediente clasificándose para el Mundial alternando grandes momentos con otros francamente mejorables -en fin, siendo Croacia- y Eslovenia se quedó de nuevo con la sensación de estar a punto de algo grande. Aun sin Smodis ni Dragic por lesión, debieron haber ganado a Serbia y meterse en la final. Final que hubieran perdido, claro, pero la primera medalla de la historia del país sigue haciéndose esperar.

10- Los comentaristas de La Sexta.- es complicado tener a cuatro personas comentando un partido y que nadie aporte nada. Demasiado miedo a meterse en jardines. No se comentan las decisiones del entrenador para no quedar mal con el entrenador, no se comentan las malas actuaciones de los jugadores para no quedar mal con los jugadores... Solo se suman gritos y apuestas y porras y bromas personales que los demás no entendemos. Andrés Montes es un tipo curioso: lleva 25 años comentando baloncesto y aún no sabe quién es Oscar Robertson -ayer le llamó Robinson varias veces-.

¡Enhorabuena a todos y a festejarlo!