A Mai le asusta la expresión "carne de biógrafos". Lo entiendo, es una mala definición, y procedo a contestarle: "es todo lo contrario a ser carne de fotógrafos".
Es complicado diferenciarlo porque la música tiene una repercusión más instantánea y la literatura parece que puede llevar un camino más largo. Hay obras que se re-editan siglo tras siglo y cada cierto tiempo aparecen inéditos de cierta calidad.
Pero a lo que me refiero no es a un intento absurdo y forzado por figurar, ni siquiera por perdurar, sino a la sensación de "estar haciendo algo" y de "estar haciendo algo juntos". Mai o Joaquín Reyes o Rojas o Nacho Vigalondo, mi adorada Inés Thiebaut... Estamos "haciendo algo", aquí y ahora, y alejados hasta cierto punto de los grandes focos y eso está muy bien, y fantaseo con la posibilidad de que dentro de muchos años, cuando alguien se acuerde de estos tiempos empiece a rescatar emails y cenas y conversaciones y entrevistas y de repente todo encaje como en los buenos libros de crítica literaria.
Y a eso me refiero, simplemente. No a ser la portada del Super Pop, por poner un ejemplo. Huir de la mediocridad, tan solo. No puede ser tan difícil.
La fiesta del aguafiestas
-
[La Brújula (Opiniones ultramontanas), 3:05]
Buenas noches. Mi aguafiestismo profesional me obliga hoy a la tarea,
ciertamente desagradable, de arremete...
Hace 6 horas