El año no acaba de arrancar. Puede no parecer un pensamiento muy positivo, pero lo es. Estoy convencido de que tarde o temprano acabará pasando algo bueno. Parece que todas las circunstancias profesionales, personales, familiares... que quedaron colgando en 2006, siguen ahí, esperando, sin moverse.
Nada perdido, nada ganado.
No es que las cosas vayan mal, por tanto. De ninguna manera. Pero podrían ir mejor. Van a ir mejor. Hace falta sólo un poco de suerte, un empujón de algún lado. Algo inesperado, pero trabajado en algún momento anterior. 2007 tiene que demostrar su valía y de momento se muestra tímido y acomplejado.
Adelante, sin miedo. Valiente.
El Gobierno recuerda que para escuchar las conversaciones de Ábalos, Cerdán
y Koldo es necesario el «pajaporte»
-
Viendo que millones de españoles llevan días escuchando las conversaciones
entre José Luis Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García, el Gobierno ha
recordado q...
Hace 4 horas