Incluso un Chico Escritor, sin jefes explícitos ni horarios ni turnos que respetar, necesita de vez en cuando irse de vacaciones. Sobre todo cuando está trabajando en dos libros más un corto y llega Inés dispuesta a retomar por fin la ópera que estábamos planeando desde hace un año y medio.
O me tomo tres días o me da un ataque.
Me voy a Trujillo, vuelvo el 28. Pasen unos buenos días.
#14 Lo que hay que leer
-
El aburrimiento
El departamento de todo
¿Los libros están acabados?
Padre e hijo…
Hace 8 horas