Hace poco comentaba un sondeo de El Mundo en el que, en mi opinión, se mostraba una leve tendencia de los dos partidos mayoritarios a perder votos, tanto en la totalidad de papeletas como en el porcentaje acumulado. Aquel análisis me costó varias críticas desde distintos lados: desde los que consideraban que no se podía hablar de caída del bipartidismo cuando uno de los dos partidos subía hasta los que se quejaban de la ausencia en mi artículo de otros partidos como Equo, cuyo resultado no podía valorar... porque no estaba en la encuesta.
Por cierto, sí, creo que Uralde sacará un escaño, probablemente en Madrid o en Barcelona, pero esto es una predicción como cuando digo que Villa es un delantero que no sirve para el Barça y a continuación marca un gol en la final de la Champions por toda la escuadra. Tómenselo así.
La encuesta de El País tiene algunas desventajas obvias pero una gran ventaja para el analista: solo recoge la intención de voto de los dos principales partidos, o al menos es lo único que se muestra en su página web. El sondeo atribuye al PP una expectativa del 44,8% y al PSOE una previsión del 30,7%. Por la consabida ley electoral, aunque los populares ganarían las elecciones sin acercarse al 50% de los votos, está claro que sí conseguirían bastante más de los 176 diputados que otorgan la mayoría absoluta. De hecho, El País calcula su resultado en torno a los 185, con todas las reservas.
Al PSOE no le da más de 120. Teniendo en cuenta la entrevista que Javier Moreno hizo a Rubalcaba y que se publicó este domingo en la que el candidato socialista no daba una y era incapaz de concretar una propuesta sin contradecirse -mérito también, indudable, de su entrevistador- el resultado puede calificarse hasta de "bueno". Muchos socialistas piden un debate y no sé yo, de verdad, leyendo al ex-vicepresidente y miembro de distintos gobiernos desde 1992, si es la mejor idea.
En cualquier caso, la encuesta confirma la tendencia que yo apuntaba en el artículo de la semana pasada: la suma total de votos de PP y PSOE baja, y no solo baja una para subir la otra, sino que baja sumando los totales. Mientras en 2008, recordemos, coparon el 83,8% de los votos y esa suma bajaba al 77,3% en el citado sondeo de El Mundo, ahora, según Metroscopia se quedarían en el 75,5%, que si unimos a una presumible bajada en la asistencia a las urnas -que el sondeo cifra en torno al 5%- más la probable subida del voto en blanco, nos quedaríamos aproximadamente con unos dos millones de ciudadanos que habrían dejado de confiar en estos dos partidos.
Por supuesto, insisto, soy consciente de que la culpa de ese descenso es exclusiva de la debacle del PSOE, pero no ha habido el tradicional trasvase de votos, es decir, esos 13 puntos porcentuales que bajan los socialistas no los recuperan los populares, que solo subirían en torno al 4%, suficiente para llevarse de premio todo el poder legislativo, probablemente, de creer la predicción de la encuesta, con el mismo número de votos que en 2008.
La semana pasada yo vinculaba de manera algo grosera la bajada de los dos partidos con el 15-M o más específicamente con lo que se ha dado a llamar en Internet el #nolesvotes. Es imposible saber qué efecto ha tenido ese movimiento sobre el electorado o si simplemente esa iniciativa reflejaba sin más algo que ya estaba previamente en la sociedad. Observando la evolución de sondeos de Metroscopia, el resultado combinado más bajo de PP +PSOE es de diciembre de 2010, en plena polémica de la Ley Sinde, cuando la bajada de los socialistas fue tan espectacular que la suma de los dos partidos quedó en un 67,4%.
Es tarea de cada uno decidir a quién va a votar. Yo he mostrado mi simpatía por un "voto de castigo" a los dos partidos que se han repartido el poder institucional en los últimos 29 años ante los escándalos de corrupción, inutilidad, endogamia, falta de transparencia y sometimiento de las minorías mediante una ley electoral injusta que ambos han tolerado e incluso incentivado. Creo que elegir entre Rubalcaba y Rajoy es tan duro, nos lo han puesto tan difícil, que es una buena noticia que al menos dos millones de ciudadanos esta vez elijan no elegir y busquen otras opciones.
¿Qué opciones? Las que usted quiera. Esto, en cualquier caso, es lo que pienso yo, basándome en una encuesta. Ni pretendo sentar doctrina ni puedo poner la mano en el fuego por esas perspectivas. Quédense con lo que les sirva de todo esto y limítense a ignorar el resto.
Actualización martes 13: El País ha publicado hoy los resultados para algunos de los demás partidos. En concreto, los nacionales: IU subiría del 3,8 al 6,2% mientras UPyD casi cuadriplicaría sus votos, pasando del 1,2% al 4,4%. En el apartado "otros" hay una subida también del 11,2 al 13,9%. En esta categoría entrarían los partidos nacionalistas, incluida Bildu, que estoy convencido de que tendrá un excelente resultado en conjunción con Aralar, Equo, FAC, Compromis y un largo etcétera que, el 20-N, tengo la impresión y no lo digo como algo necesariamente bueno, será especialmente largo.
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