sábado, diciembre 31, 2011

Yo sobreviví a 2011


A mí que tanto me gusta llorar y que tantos motivos debería tener en un 2011 que ha sido pésimo para tanta gente, no me va a quedar más remedio que hacer un post alegre, de celebración y entusiasmo. Será un post corto, a diferencia de otros años, porque ya se sabe que la tristeza da para mucha más literatura que la alegría y en términos generales aunque, insisto, estéticamente me joda, me resulta complicado pedirle más a un año de lo que me ha dado este.

Ha sido un año de viajes a Nueva York y conciertos de OK Go!, que para mí es mucho decir. Un año de encontrar trabajo, muchos trabajos, de hecho, y estar contento en ellos hasta el punto de poder decir que no a las grandes estructuras, que es lo que todos deseamos. La vida de profesor salvaje es mejor que la vida de profesor interino que tiene que dar gracias por todo. Simpatía por el riesgo. Un año de cursos de literatura creativa, cursos de inglés, clases particulares...

... Y además un año clave en mi carrera "periodística", sea eso lo que sea. Tengo la sensación de trabajar exactamente donde me gustaría trabajar si no estuviera ya ahí. A lo largo de estos doce meses he colaborado de una manera u otra en JotDown, Panenka, El Imparcial, Culturamas, MSN, Zona de Obras, Freek!, Revista Eñe, Fiebre de Fútbol, Neo2, Sigueleyendo, más mi blog noventero y por supuesto, este... Y lo sensacional es que prácticamente en todos lados cobrando. Sí, ha habido problemas, claro, pero el hecho de que siga como colaborador de todas las revistas menos de Culturamas, por razones personales que no vienen al caso, y MSN, por fin de contrato y condiciones abusivas, deja claro mi grado de satisfacción en todos lados.

Las redes sociales: presumir de 1.250 seguidores en Twitter cuando Justin Bieber tiene 40 millones es absurdo, pero yo no soy Justin Bieber ni pretendo serlo. Como dijo Ray Loriga, a mí me da igual que un millón de personas griten mi nombre o que una persona lo grite un millón de veces. Pensar que hay 1.250 ordenadores distintos atentos a las chorradas que yo pongo en Twitter me parece la leche, en serio, no podría haberlo imaginado nunca. Para mí, 1.250 seguidores son el universo. Más allá pierdo la cuenta.

Lo que nos lleva al terreno personal. Ayer se lo decía a una amiga: no me imagino rodeado de gente mejor. En todos los aspectos. Supongo que todos pensamos que nuestros amigos son los mejores del mundo, pero en mi caso es sorprendente darte cuenta de que son tantos. En serio, a mí me parece sorprendente, desde mi familia a los recién llegados, saber que hay tanta gente ahí sensacional, talentosa, entregada, valiente... y que de vez en cuando quieren verme, pasar su tiempo conmigo. Añadámosle el triunfo del "quiero verte porque quiero verte", el desguace de las narrativas... las comidas imprevistas en bares de Medina del Campo, las noches viendo al Barça y al Madrid en distintas casas, distintas ciudades, con distintas recompensas, los cumpleaños emotivos...

De salud, mejor. No diré bien porque no es cierto. Pero mejor que en 2009 y 2010, esos dos años viscosos. Lo suficientemente mejor como para disfrutar las cosas, que es lo que faltaba.

Pongamos un pero: mi lucha con el mundo editorial de ficción. Una lucha que acabará muy pronto, en el momento exacto en el que me dé cuenta de que luchar no es necesario. Sin embargo, 2011 ha sido el año de mi segunda novela, "El pingüino", la sensación añorada de pasarse un verano entero escribiendo y escribiendo las aventuras de Iratxe Añorga por Madrid y Estados Unidos. Ha sido el año de volver a los cuentos, a algunos guiones... Saldrán o no saldrán. Los leerán treinta personas o treinta mil. Eso da igual. Ya les he dicho que a partir de determinadas cifras yo me pierdo por completo.

Pero alguien las leerá y le gustarán o no y eso es lo importante. El resto es silencio.

Me gustaría pensar que 2012 será mejor que 2011 pero a mí me resulta complicado imaginarlo, así que permítanme al menos deseárselo a ustedes. Gracias por estar ahí. Este año, nuevo record: 101.652 visitas, 135.063 páginas vistas, 14.694 visitantes que repiten... Eso en un blog, un miserable blog que nació hace seis años para promocionar un libro. Gracias, en serio. Dormíamos. Despertamos. Disfruten de esta noche.