martes, junio 10, 2008

El fenómeno Bubok


Conocí a Ángel María Herrera hace cinco años y pico. Él era el responsable de la página http://www.grupobuho.com/ y yo subía relatos de vez en cuando. Luego me encargué del servicio de críticas de la página y después de la sección de relatos, llamada Cuentanet. Ángel María amplió los servicios: colaboró con Diana Morales para crear Portal del Escritor, una página web donde el escritor novel pudiera encontrar todo tipo de recursos para desarrollar su escritura, entre ellas, cursos.

Yo empecé con el de microrrelatos, luego me encargaron el de Redacción y Estilo y finalmente propuse el de blogs. Funcionan bastante bien, la verdad.

Ángel María no se paró ahí, sino que decidió abrir una editorial. Eso, para mí, era una excelente noticia. La editorial se llamaría Grupobuho y yo iba a ser el encargado de prensa y comunicación. Rechacé el puesto porque no me veía capacitado. Las cosas entre Ángel y yo funcionan así, dentro de una honestidad total: él me propone y yo le digo. Tres años después pasó algo parecido con Bubok: su oferta era muy buena, mi situación emocional y profesional no me permitía hacerme cargo de un trabajo así.

Sin embargo, se ve que han contratado a alguien mucho mejor que yo: en los dos últimos días, Ángel María y Bubok han salido en El País Semanal y en un largo reportaje de elmundo.es. Me parece prodigioso, sobre todo teniendo en cuenta que soy parte integrante del proyecto gracias a mi libro, que él editó en su momento.
Aun así, hay algunas dudas que no se aclaran y lo digo desde fuera y por supuesto con todo el cariño: publicar el libro en la página parece fácil, pero ¿cómo se hace el libro?, ¿quién se encarga de maquetarlo, corregirlo, llevarlo a imprenta...? Si lo hacen ellos, ¿a qué precio? Eso, obviamente, no sería gratis. Una vez los ejemplares estén disponibles, ¿quién los guarda? Es decir, supongamos que hay 700 libros disponibles en la tienda virtual de Bubok y que cada uno tiene una tirada de 80 ejemplares, de la que ir tirando poco a poco, ¿dónde están esos 56.000 libros?

Ángel María insiste en que se pueden editar libros bajo demanda. Es decir, si voy a vender tres, pues hago tres. Si creo que voy a vender 300, hago 300. Es complicado. Las imprentas no hacen tres ejemplares sin más de un solo libro. Las tiradas de menos de 80 ejemplares son escasas.

Si realmente Bubok ha conseguido lo que propone: que uno pueda tener su libro ahí, de manera gratuita, sólo con entregar los ejemplares para que los manden al comprador, a cambio de un 20% de la compra y sin necesidad de encargar grandes ediciones, estaremos ante un fenómeno sin igual en el mundo de la edición. Una verdadera revolución.

Mientras vamos saliendo de dudas, lo que sí pueden hacer es comprar mi libro.