jueves, octubre 03, 2019

Tres malentendidos sobre Errejón que complican la vida a la izquierda


Una de las razones por las que el partido de Errejón decidió dar el salto a la política nacional fue luchar contra el mantra que dice que la alta abstención perjudica a la izquierda. Su sentido era, pues, movilizar a ese posible electorado abstencionista harto de Sánchez e Iglesias, y así evitar que la derecha sumara 176 escaños por pura dejadez.

En un principio, la decisión fue muy bien acogida por determinados medios de comunicación progresistas y desde luego por el propio PSOE, que dio una cálida bienvenida a su nuevo adversario en la esperanza de que se comiera a Podemos y se convirtiera en socio prioritario para la próxima legislatura. Sin embargo, desde el punto de vista de esa izquierda concreta, creo que se están dando por hechas demasiadas cosas que no están tan claras. Centrémonos de momento en estas tres:

- "Era el momento de que Errejón se presentara, aportará aire fresco". No estoy de acuerdo ni desde el punto de vista personal ni desde el punto de vista del partido. En una sociedad hiperconsumista, un político que lleva en las televisiones cinco años de forma casi ininterrumpida no supone ningún aire fresco. Para algunos será una esperanza pero para otros, claramente, es una decepción. Si lo que quería era entrar cuanto antes en la rueda de grupo parlamentario-subvención-propaganda institucional-posible ministerio... con diez escaños le puede valer, pero a largo plazo la decisión es un error: Errejón no es ahora mismo más que la némesis de Iglesias y sorprendentemente Iglesias sigue aguantando, cosa que no estaba tan clara después del sainete de este verano. De hecho, la presencia de un enemigo de alguna manera "refuerza" al líder de Podemos y moviliza a su electorado. Si Errejón quiere tener algún papel importante en la política nacional debe esperar a que realmente se le vea como un elemento aglutinador y no lo contrario. Eso quizá lo habría conseguido dándose un poco de tiempo y esperando que determinadas aguas se calmaran.

En cuanto a la propia plataforma Más País, no creo que sea su momento. Generalmente, los partidos de una tendencia se consolidan como alternativa cuando el principal representante de esa tendencia está en apuros. Ciudadanos creció en Cataluña cuando PP y PSOE empezaron a desmoronarse, captando buena parte del voto no nacionalista; Podemos fue una expresión de la incapacidad del PSOE de plantar cara a un PP en pleno esplendor, mientras que Vox solo ha triunfado a costa del partido de Casado, condenado a la oposición por una moción de censura "de los enemigos de España". Es muy complicado conseguir un espacio en la izquierda cuando la izquierda es hegemónica y está en el gobierno. Aquí de nuevo, esperar habría sido una excelente opción.

- "La candidatura de Errejón va a significar el fin de Unidas Podemos". Yo también lo pensé en su momento, pero me asombra cómo siguen resistiendo las bases de UP en torno a su líder. Sin duda, el "relato" acerca de lo que pasó durante las negociaciones de gobierno lo han ganado por completo. Muchos votantes de UP irán a Más Madrid por supuesto, pero la mayoría ya se fue en su momento. ¿Y adónde se fue? Al PSOE. Era la única alternativa ante el personalismo exagerado de Iglesias. No era aquel voto al PSOE un voto convencido sino resignado que probablemente vaya de regreso en estas elecciones solo que ahora con dos posibles destinatarios: el propio Iglesias o Errejón.

Más País es una opción muy apetecible para todos aquellos votantes de izquierdas que siguen pensando que el PSOE es demasiado liberal pero a la vez se sienten seguros con Sánchez en el gobierno. Prácticamente lo único que sabemos del partido de Errejón es que no le va a poner muchas pegas al PSOE en una posible investidura, es decir, que determinados votantes pueden votarles tranquilamente sin "mancharse las manos" con el historial del PSOE y a la vez en la seguridad de que estos sí, tarde o temprano, se pondrán de acuerdo. Lo que nos lleva a...

- "Errejón será una pieza clave para la gobernabilidad". Al contrario. Seamos sinceros, ahora mismo solo hay dos escenarios que permitirían la gobernabilidad del país:

1- Un resultado espectacular del PSOE que les acerque a los 140-150 escaños en solitario.

2- Una mayoría absoluta de PP, Ciudadanos y Vox.

La presencia de Errejón descarta ya casi por completo el primer escenario. El PSOE no subirá en las próximas elecciones. Es más, lo más probable es que baje, quedando en una horquilla entre 110 y 120 escaños que hará aún más improbable un gobierno en solitario. Ante tal escenario, la alternativa volverá a ser el gobierno de coalición o de participación o como quieran... solo que ahora, en vez de tener que negociar con un socio potencial, tendrán que hacerlo con dos. Con dos que, además, se odian entre sí. Como mucho, podría ayudar al segundo escenario, pero tampoco lo veo tan apocalíptico. Una bajada potente del PSOE puede poner en peligro su victoria electoral pero la subida del PP tendría que ser tan desmedida que se llevara por delante a Ciudadanos y a Vox. Mientras en Cataluña y el País Vasco sea una fuerza residual, el PP lo tiene muy complicado para sumar mayorías absolutas. Necesita que las tres fuerzas de derecha sumen casi el 60% de los votos fuera de esos territorios. Teniendo en cuenta que acaban de celebrarse unas elecciones municipales y autonómicas que ganó el PSOE con cierta contunencia, me cuesta creer que la cosa haya cambiado tanto.