miércoles, febrero 02, 2011

90210



No sabíamos cómo llamar al equipo así que le llamamos "NPI" y no sabíamos qué utilizar como uniforme así que compramos a granel camisetas con la foto de los chicos de "Sensación de vivir" y nos las repartimos. Cada uno quedó encargado de ponerle un número a la suya.

No todo el mundo lo hizo.

El fascinante mundo de "Sensación de vivir", que conviene no confundir en ningún caso con "Melrose Place" porque "Melrose Place" pretendía ser un "Falcon Crest" o un "Treintaytantos" actualizado pero "Sensación de vivir" no pretendía ser nada. Ese era su triunfo: la nada. Chicos y chicas más o menos guapos para revistas de adolescentes. Una vez vinieron dos a un partido del Atleti y les hicieron dar el saque de honor y todo. Uno de ellos tenía casi 30 años pero interpretaba a un ricachón de 18. Steve se llamaba. Creo que el otro, David.

A mí me gustaba Kelly, aunque tuviera cara de asco. Una tremenda cara de asco. Brenda no era mi tipo -ni siquiera lo fue en "Mallrats"- y de Tori Spelling creo que mejor ni hablamos. Los temas tocaban la popularidad, el amor y la amistad -no te fallaré, somos compañeros- la lealtad y los celos, el sexo, por supuesto, las primeras borracheras, cómo llevarse bien con los padres... Nada que no viéramos luego en "Al salir de clase" o más recientemente "Física y química", "SMS" y delirios sucesivos mucho más hormonados y de clase baja-media, que tiene mucho más encanto.

He de decir que a mí siempre me gustó más "Al salir de clase" que "Sensación de vivir". Mucho más, de hecho. Las chicas eran más guapas y todo lo que tenía de cutre lo tenía de vivo. Incluso el ochentismo tardío, rollo Vanilla Ice, de "Salvados por la campana" tenía más atractivo.

En fin, dejo de humillarme. "Sensación de vivir" o "90210", como se conocía la serie en Estados Unidos por el distrito de Beverly Hills en el que vivían los protagonistas, era un catálogo de cómo ser popular y disfrutarlo con un pequeño punto de "lado oscuro" porque lo oscuro a su vez empezaba a ser masivamente popular. Por ejemplo, a "Jeremy", de Pearl Jam, le podían las expectativas y los estímulos y uno de ellos, fíjense, casi al final, en blanco sobre negro era el código postal de marras.

Hace un año y pico tuve la idea de hacer una serie de televisión. Creo que ya no la haré así que lo puedo contar aquí. Si luego la ven hecha por otros, que sepan que la idea fue mía. De hecho, me sorprende que a nadie se le haya ocurrido todavía. Mi serie se iba a llamar "28004", y quien no lo entienda, por favor, que busque en la página de Correos y no me niegue que habría tema para varias temporadas.